Uno de Roger Salas en El País (aquí la versión larga) y otro de Isis Wirth en La Reina de la Noche; siento contradecir a Isis Wirth, con todos mis respetos, pero en un video en youtube sobre la historia de Noureyev se ven fotos de algo parecido a una conferencia de prensa que dio el artista en París en el momento de su refugio político, donde seguramente le preguntaron de política y él debió responder algo, me imagino yo. Las imágenes de los bailarines cubanos que se quedaron en 1968 son bastante conocidas y, de los que hablaron, todos se manifestaron políticamente. Un fragmento en Conducta Impropia (1984), documental de Néstor Almendros y Orlando Jiménez Leal, en la que los bailarines hacen sus primeras declaraciones:
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Del mismo modo, también sabemos que cuando una célebre bailarina cubana pidió asilo político en España en los años 80 cometió el error según se dijo en la época de decir que ella no había sido una perseguida política, sin embargo estaba pidiendo el asilo político. Error que se cometía a menudo en aquella época, ciertamente, como dice IW por miedo, y que es comprensible, aunque irritable, y sobre todo en esta época en la que ya nadie duda de la situación que viven los cubanos, lo que no excluye a los bailarines. A no ser que se considere que los bailarines no deberían hablar de política, bueno, algunos no deberían hablar de nada; pero la señora Alicia Alonso ha sentado el espantoso precedente de hablar inevitablemente de política, a favor del castrismo, y en eso la ha seguido, el señor Carlos Acosta, residente en Londres. No veo por qué aquellos que piden asilo político no expresen políticamente lo que piensan del régimen castrista.
Por cierto, hablando de dietas, recuerdo que en una ocasión entrevisté junto a Javier de Castromori a Joan Boada aquí en París, y el director del Joven Ballet de Francia le reprochó que comiera Mac Donalds porque podía ganar peso, así que no sé qué será peor, si los frijoles con arroz o los Mac Donalds, pero ni siquiera frijoles negros y arroz podrán comer ahora mismo en Cuba como no sea comprados con CUC.
Creo, sin embargo, que el hecho de no poder hacer el arte que esos artistas deseaban y desean hacer ya de hecho constituye un problema político, pero, como siempre digo, cada cual es dueño de decir lo que piensa, incluso al criticarlos por lo que hayan dicho o no hayan dicho. Lo que no podemos es exigirle a unos lo que no le exigimos a otros, exclusivamente porque estos «otros» sean bailarines en la ocurrencia, artistas, pintores, etc, sobre todo en un mundo donde los artistas cada vez más opinan políticamente.
Por lo demás les deseo suerte y espero que puedan hacer carreras artísticas tal como ellos desean y seguramente merecen.
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